sábado, mayo 31, 2025

Fin de temporada. ¿A dónde viaja la orejona?

  


El torneo de clubes que a nivel mundial más repercusión tiene llega a su fin. Hoy se enfrentan el Inter contra el PSG, dos equipos que no representan una sorpresa mayúsculas la participación en esta instancia pero tampoco eran los candidatos a mediados del 2024.

El italiano venía surfeando la temporada, a principios de abril se hablaba del triplete, sin embargo el gol del Titi Reijnders selló la eliminación en semis de Coppa Italia y empezó la debacle en Serie A. Finalmente, el Napoli dio la vuelta y al neroazzurro solo le queda triunfar en Munich para salvar el año. Aclaración teórica que ya vengo pregonando, el Mundial de Clubes es atemporal, no es de ni de la temporada 24-25, ni de la 25-26.

Del otro lado de los Alpes, el PSG cumplió con el trámite local. La diferencia que saca hace imposible analizar la league 1. Como desde hace un lustro, después de la inversión qatarí, el único objetivo es ganar la Champions. Luego de un recambio furioso en las figuras, llega a Alemania con una base sólida y la confianza de mañana desfilar por Chamsp Elissé.

En un primer análisis del partido, ninguno de los dos equipos tiene jugadores aspirantes al balón de oro. Muy buenos, y equilibrados, planteles pero sin estrellas rutilantes. Por el lado del equipo de Lombardi, un 5-3-2 muy sólido en defensa, con actuaciones rutilantes de Sommer, con los carrileros llegando al fondo y una temida dupla ofensiva. El PSG suele jugar 4-3-3, con un mediocampo solidario que busca poner en ventaja a Dembelé y esperar que Kvaratskhelia frote la lámpara.

Se espera un encuentro parejo, conociendo a los entrenadores, posiblemente tendremos quince minutos de estudio, sin que ninguno pueda prevalacer. Luego de algunos ajustes, creería que el Inter podrá imponer su juego por fuera para terminar con la potencia de sus delanteros. El PSG buscará controlar la pelota para luego salir disparado intentando encontrar mal parado al Inter, cosa que no sucede de manera muy frecuente. 

Con un partido cerrado, veo al PSG ganando (posiblemente en tiempo extra), sacandose la mufa, reivindicando el juego colectivo frente al amontonamiento de estrellas. Luis Enrique le dio una identidad, un funcionamiento y jugadores de clase medio dieron el paso al frente. Creo que un 2-1, después de arrancar perdiendo es el número para esta noche.

EG

Primer post compartido con: https://sustanciayfutbol.blogspot.com/?m=1