Identidad. Identificación y pertenencia a un grupo. Se contruye. Eso es cultura. Romper la heterogeneidad y fusionar las partes al todo. Suerte que coincidimos en fechas, cada elemento es necesario y el que falta se nota. Una semana a todo trapo. Parece poco tiempo pero cuando se lo exprime al maximo y se disfruta cada instante, los buenos, los malos y los regulares, se eternizan. Cada vez más nos unimos y comenzamos a darle forma a esos lugares comunes que nos son tan gratos. Edificamos un templo. Escuchamos su música. Y despues lo principal, esa calle: Treinta y Siete. Conocemos cada grano de arena de ahí, desde la bajada unos metros hacia la izquierda (al norte) viendo el mar. Somos los mismos, seremos los mismos.
Son momentos donde la tristeza de abandonar momentos tan lindos se siente. Nos colma la amargura. Sin embargo, reflexionando el alma se repleta de esperanza, de ansiedad, de volver a disfrutar de unas vacaciones de puta madre, dentro de un año.
Obviamente, quedan los reencuentros que esperemos que crezcan geometricamente año a año.
NDR: Ya vendrá este Post y otros con foto. Cuando tenga la camara. Ya vendra el Compilado Templo 08.
